En el tranquilo pueblo suizo de Fleurier, donde la maestría relojera susurra en cada calle, nació una idea ambiciosa. Era 2016, y Octavio Garcia, fundador de Gorilla Watches, tenía una misión: interrumpir las convenciones de los relojes de lujo. Armado con la visión de hacer que los relojes de alta complicación fueran accesibles para una nueva generación, Garcia se acercó a Vaucher Manufacture Fleurier, una potencia en innovación horológica.
El resultado de esta colaboración fue el Gorilla Drift, un reloj que dio nueva vida a la complicación de las horas errantes, que data de siglos atrás. Pero el viaje no terminó ahí. Tras años de innovación incansable, retroalimentación y refinamiento, el Drift evolucionó hasta su forma más audaz: el Drift Mercury Wandering Hours. Más que un reloj, es una celebración de la colaboración, la ingenio y la inquebrantable pasión de Gorilla por contar historias a través del diseño.
Una Asociación Nacida de Ideas Audaces
En el mundo de la relojería, las asociaciones son raras. El proceso de crear algo verdaderamente único requiere no solo experiencia técnica, sino también una visión compartida. Para Gorilla Watches y Vaucher Manufacture Fleurier, la colaboración fue eléctrica desde el principio.
Juntos, decidieron reinventar la complicación de las horas errantes, una maravilla mecánica que data del siglo XVII. Históricamente reservada para la élite, esta complicación transforma la lectura de la hora en una elegante danza de discos rotatorios. Pero mientras el concepto estaba impregnado de historia, la ejecución sería completamente moderna.
En un taller conocido por producir movimientos para marcas como Richard Mille y Parmigiani Fleurier, nació el módulo G-5238. Montado sobre el confiable movimiento base ETA 2824-2, representó el equilibrio perfecto entre innovación y durabilidad. El objetivo era simple pero ambicioso: hacer una complicación típicamente asociada con relojes de cinco cifras accesible a una fracción del precio.
La Forma del Drift
El Drift no solo se trataba de mecánica; era acerca de crear una obra maestra portátil. Inspirado por sus años en Audemars Piguet, Garcia infundió al reloj elementos de diseño inspirados en el mundo automovilístico. La caja cuadrada de carbono forjado evocaba la ligereza y resistencia de los marcos de coches de alto rendimiento, mientras que el bisel de cerámica pulida recordaba los acabados elegantes de los vehículos de lujo. Cada detalle, hasta los protectores de corona de titanio sobredimensionados, fue diseñado para sentirse táctil y con propósito.
Cuando el primer Drift llegó a las muñecas de los coleccionistas, quedó claro que Gorilla había creado algo extraordinario. La forma única de mostrar el tiempo cautivó a los admiradores, pero fue la artesanía y la historia detrás de él lo que cautivó a los entusiastas.
El Mercury: Un Nuevo Capítulo
Avancemos hasta hoy, y el Drift Mercury se erige como la culminación del viaje de Gorilla. Nombrado en honor a los legendarios Mercury Lead Sleds, esta pieza lleva el mismo espíritu de reinvención que definió a los autos personalizados de los años 40 y 50. El Drift Mercury no es solo una evolución; es una celebración.
Su esfera azul sol con destellos resplandece como la pintura de un hot rod restaurado, cambiando de tono a la luz. La complicación de las horas errantes se desliza por la carátula, hipnotizante en su precisión. Ligero pero sustancial, la caja de carbono forjado, el bisel de cerámica y los acentos de titanio logran un equilibrio perfecto entre robustez y refinamiento.
Lo que realmente distingue al Mercury, sin embargo, es su resonancia emocional. Este no es solo un reloj; es un recordatorio de lo que es posible cuando la visión se encuentra con la determinación. Lleva consigo el legado de cada desafío enfrentado y cada elección audaz tomada en el camino.
Creado por Maestros
El Drift Mercury es tanto producto de Vaucher Manufacture Fleurier como de Gorilla Watches. En el video promocional Gorilla Fastback Drift: Story of a Unique Partnership, el meticuloso proceso detrás de este reloj cobra vida. La experiencia de Vaucher se extiende mucho más allá del movimiento, tocando cada aspecto de la creación del Mercury. Desde la ingeniería precisa de su módulo personalizado hasta el ensamblaje de su avanzada caja, cada detalle refleja el orgullo y la maestría de la relojería suiza.
Es una colaboración que no solo muestra la capacidad de Gorilla de romper barreras, sino que también demuestra el valor atemporal de la artesanía suiza.
Un Reloj Que Te Mueve
Cuando te pones el Drift Mercury en la muñeca, estás entrando en una historia. Es una historia de pasión, precisión y perseverancia. La complicación de las horas errantes te invita a ver el tiempo de manera diferente, mientras que los materiales ligeros y el diseño audaz te recuerdan que el lujo no tiene que ser tradicional.
Para los coleccionistas, el Drift Mercury es una revelación—una complicación que rivaliza con las de Audemars Piguet y Urwerk, pero a un precio de $3,250. Es un reloj que desafía las convenciones de la alta relojería, demostrando que la verdadera artesanía puede ser tanto innovadora como accesible.
El Camino Abierto por Delante
El Gorilla Drift Mercury Wandering Hours no es solo un reloj. Es un testamento de lo que es posible cuando la tradición se encuentra con la rebelión, cuando la innovación es impulsada por la pasión. Encierra el viaje de Gorilla desde una idea audaz en Fleurier hasta una marca que está redefiniendo el mundo de la relojería.
Y sin embargo, como Octavio Garcia podría decirte, el Drift Mercury no es el destino. Es solo otro hito en el camino de Gorilla hacia la redefinición de la medición del tiempo.
Para un vistazo más cercano a la colaboración que hizo posible el Drift, mira el video Gorilla Fastback Drift: Story of a Unique Partnership